Menos de un mes y... En fin.

Siento que necesito cambiar de todo, de aires, de gente, de todo... Lo malo es que debo alejarme de ti. No tienes la culpa de nada ni de que él haya cambiado de idea, sería absurdo, pero yo no estoy bien teniéndote tan cerca. Son dos días, pero dos días en los que mis esquemas se rompen, mi corazón duda y mis manos tiemblan; necesito alejarme para poder olvidarte, tienes tu vida y sí, yo estoy en ella, pero no donde tú y yo sabemos que me gustaría estar: me estoy haciendo daño.

Soy egoísta, lo sé, pero ahora el apoyo que tenía se aleja de mí y yo sola no puedo... No puedo por la sencilla razón de que vuelvo a lo mismo, levantarme el jueves deseando que pase rápido la semana, que llegue el lunes y acabe, para en unas horas verte, volver a tenerte cerca...

Ya tengo una salida, otro sitio donde también me valoran aunque no tanto como tú, donde pasaré igual las horas del día y de parte de la noche, pero al menos podré rehacer mi vida y tenerte igual, en mi corazón, pero olvidando poco a poco esa sensación de frío que me recorre la espalda cada vez que apareces, olvidando esa mirada tan dulce que, quizás sea así para todo el mundo, pero a mí me resulta tan especial...

Necesito olvidarte, mi vida, soy realista, sé que nunca serás mío pero no puedo evitar que se me llenen los ojos de lágrimas cuando sé que no te voy a ver ese día y medio a la semana que tanto quiero y que tanto daño me hace...

Ahora estoy mal, acabo de perder la oportunidad de empezar a recorrer otro camino, de su mano, quizás no se sienta preparado para ello o quizás se haya dado cuenta de que sueño con él cada noche, pero tú siempre suenas en mis labios...

Necesito volar, alejarme, olvidar tanto...